Llegado el día no encuentro con quién ir a Santiago, así que por un lado hasta me alegro, así puedo ir escuchando música a niveles en los que no se podría mantener una conversación, para ir entrando en calor me decido por Strangers in the night de UFO.
Ya en la capital lo de siempre, un poco de palique con los conocidos, entre otras alguno me cuenta que está haciendo triple sesión casi todos los días (¡!), muchos otros me preguntan por el Aviaman, que si la bici es tan dura, sí, que si de verdad es lo que cuentan, sí. Si sirve de algo la comparación, a ojo yo diría que en el puerto más duro, que es el penúltimo, el tramo de 3 o 4Km de pendiente salvaje, tiene algo más de desnivel que la de Santiago, además de un asfalto más pegajoso. También advertiría a la gente de comer bien a la vuelta, porque el último puerto antes de la última bajada se le puede atragantar al que piense que ya está todo hecho. Por último, advertir de algo a lo que la gente no está dando la importancia que merece: el agua va a estar muy fría, así que, yo desde mi modesta opinión le diría a la gente que como mínimo usasen dos gorros. Como anécdota, contar que Jaco y yo tuvimos que salir del agua en un entrenamiento en pleno junio y sin gorro, porque no soportábamos el dolor de cabeza por lo fría que estaba, el resto del cuerpo con el neopreno aguanta sin problemas.
La salida como siempre a toda leche, se nota que cada vez la gente anda más, hago el primer Km. en 3:45, miro hacia atrás y van como mucho 20 atletas, y eso que picaba para arriba! Destacar el tiempo a pie de Furi, que cada vez está más fino a pie y que entra con Javi Sarmiento, el resto en su línea, los de élite entran con los primeros y los demás a algo menos de 4’, dosificando para la bici.
La bici más dura del circuito gallego hace que en este duatlón nada sea como empieza, así que los que se ceban al principio en la última vuelta se hunden, se producen muchos cambios respecto al primer sector, Furi pierde más de 30 puestos y yo hago lo contrario ganando otros tantos, los demás se mantienen más o menos sin perder o ganar más de 10.
El último tramo a pie no nos sirve de mucho a los que estamos ya vacíos de la bici, sin embargo la gente de élite consigue remontar hasta llevar al equipo a un magnífico segundo puesto, por delante del Fluvial de Lugo ni más ni menos. Enhorabuena.
Respecto a la organización, todo fenomenal, incluso se notaba que se había parcheado el asfalto recientemente para evitar accidentes aunque sí se podría mejorar el circuíto a pie, sumando al menos los 2,5Km por vuelta, o haciéndolo un poquito más vistoso (correr por un aparcamiento no es muy entretenido). También se quejaba la gente de la falta de camiseta, cuando en los demás sí que la regalan y cobrando lo mismo, bueno, no me pronuncio, sus razones tendrán, que un duatlón en una ciudad no será muy fácil de organizar. Esperemos que se siga celebrando, porque para mí es el duatlón más divertido, con constantes cambios de posición entre corredores y ciclistas.
Ah, para la vuelta nada mejor que Nick Curran and The Lowlifes a todo volumen, Reform School Girl, así ya no duelen las piernas.
2 comentarios:
A mi la camiseta me da igual pero lo que echo de menos son las pedras de Santiago que daban cuando patrocinaba la equipo.
Sobre la comparación con el Aviaman este du nada, los 4 km finales de Outeiro Malato el doble de pendiente que aquí. En Santiago por ejemplo no usé las 2 últimas coronas, allí metí todo y aún así subía atrancado.
A pie estoy fino sí, hubiera hecho una buena Vig-Bay si la hubiera corrido, es lo que tiene no haber tenido parones este invierno (el 1º en muchos años) y haber hecho cross. La bici todo lo contario, 4 salidas en carretera este año contando los 2 dus, el spinning y la btt mantienen pero no es lo mismo. Al final los km se notan.
Publicar un comentario